El domingo, todos los argentinos amanecieron con una de las postales más duras de los últimos años: un Lionel Messi, entre lágrimas, despidiéndose del Barcelona que lo vio convertirse en uno de los mejores futbolistas de la historia. “Es muy difícil para mí, después de haber tenido toda una vida acá. El año pasado después del lío del burofax tenía dudas, pero este año estaba convencido de querer quedarme acá para seguir ganando cosas”, aseguró.

Lo cierto es que la llegada del rosarino al Paris Saint-Germain es casi un hecho. Allí lo espera un equipo de élite y varios de los amigos que consiguió a lo largo de su carrera: Neymar, Ángel di María, Leandro Paredes, por nombrar algunos. De hecho, el conjuntos francés ya habría organizado la presentación del crack para este 10 de agosto, que se haría nada más ni nada menos en la Torre Eiffel si la Justicia así lo quiere.

Y es que en las últimas horas, el abogado catalán Juan Branco, en representación de varios socios del Barcelona, elevó una queja ante la Comisión Europea y demandas de suspensión provisional ante la justicia civil y administrativa en Francia para evitar que el equipo que comanda actualmente el argentino Mauricio Pochettino se haga con los servicios de La Pulga. Es cierto que es una medida desesperada, pero que por estas horas da que hablar en Europa.

El propio letrado dio a conocer esta información en sus redes sociales en una publicación que dice: “En nombre de socios del FC Barcelona, mi bufete ha preparado una queja ante la Comisión Europea y demandas de suspensión provisional ante justicia civil y administrativa en Francia para impedir que el Paris-Saint Germain firme a Lionel Messi”.

Y agregó: “Los ratios del PSG en términos de ‘fair play financiero’ son peores que los del FC Barcelona. En el 2019-2020, el ratio entre salarios e ingresos del PSG fue del 99%, mientras el del Barcelona fue del 54%. Entre tanto, la diferencia se ha incrementado. Es inconcebible que el ‘fair-play financiero’ sirva para agravar las derivas del fútbol-business, de la instrumentalización del fútbol por potencias soberanas, y la desvirtuación de las competiciones”.

Cabe destacar que Luis Ferrer, ex manager del PSG, había confirmado días atrás que Gastón Gaudio fue el encargado de hablar con el jeque Nasser Al-Khelaïfi, dueño del PSG y de buena relación con el ex tenista, y llevar a cabo las negociaciones. Además, había aclarado que actualmente el Fair Play Financiero no está funcionando debido a las restricciones por el COVID-19.

Esto le permitió al PSG no desprenderse de, por ejemplo, Kylian Mbappé,  pretendido en este último tiempo por el Real Madrid, para que pueda arribar Messi. Sin embargo, Branco hizo hincapié que de concretarse el fichaje, el PSG estaría incumpliendo el Fair Play financiero. “Pediremos a las autoridades que intervengan inmediatamente con el fin de bloquear esta operación que lesa los intereses patrimoniales de nuestro representados”, concluyó.

El domingo, a través de una conferencia que fue transmitida en este lado del mundo a las 7 de la mañana, Lionel Messi rompió el silencio y se despidió de los fanáticos del Barcelona: “Me hubiese gustado despedirme de otra manera. Nunca me imaginé irme, pero me hubiera gustado despedirme con gente, jugando y con el aliento. En el último tiempo los extrañé mucho. Ya va más de un año y medio que no puedo festejar un gol con los hinchas”.

Según explicó, le queda la “espina” de haber conseguido otra Champions League con el club que lo vuio nacer y cerró: “Tuvimos una generación que pudo ganar alguna más, pero ganamos otras cosas y no me arrepiento de nada, porque siempre dimos lo máximo. Uno de mis objetivos es volver a ganar la Champions y conseguir la mayoría de campeonatos que participe. Quiero alcanzar a Dani Alves, que es un gran amigo”.

Ya por la noche, el capitán argentino realizó una cena íntima de la que participaron Sergio Agüero, Luis Suárez y su familia, Jordi Alba y los streamers, Ibai y Coscu. “Lo del PSG es una posibilidad, pero a esta altura no tengo nada arreglado con nadie. Es verdad que tuve varios llamados, porque fueron varios clubes los que se interesaron, pero a esta hora no hay nada cerrado”, cerró Messi, que aunque lo niegue, su futuro está más cerca de Francia que nunca.